martes, 11 de marzo de 2008

Mi cafetera y yo

Alguna vez habré comentado que sin café no soy persona, así que todos las tardes me tomo mi café con una galletita. Ese café lo hago en una cafetera de dos tazas que ya tiene muchos años y a la que le tengo mucho cariño. Pues bien, de tanto darle golpes al embudito para tirar los restos del café se me ha abollado y cada vez que hacía un café nuevo se salía el agua por los bordes de la cafetera. Busqué durante unos dos meses un embudito nuevo y en las tiendas me decían que esa cafetera no existía (¿?). Por fin lo encontré en Ayamonte, nada más y nada menos. Qué contenta. Probé con mi nuevo embudo contemplando con los codos apoyados en la encimera cómo salía mi cafetito, pero la cafetera seguía perdiendo agua. Pensé que era la gomita que lleva junto al filtro, y le compré varias nuevas. Mi gozo en un pozo, también perdía agua. Ayer le compré un filtro nuevo, ya desesperada, y lo coloqué con la gomita y el embudito, cerré la cafetera con el mayor mimo posible y, ¿saben?, sigue perdiendo agua. Al final me tendré que comprar una cafetera nueva y desechar la que tengo, y es que no hay otra cosa peor que encariñarse con estas cosas...