Hoy, en este curso de biblioteconomía que estoy impartiendo en Badajoz, voy a hablar de animación a la lectura. Es una forma de intercalar un tema atractivo entre tanta terminología técnica para no aburrir a los oyentes (18 personas). Estoy segura de que disfrutarán con las estrategias que se expongan y yo, mucho más que ellos, me divertiré explicando experiencias reales llevadas a cabo en mi biblioteca que, por lo menos para algunos, han servido y sirven para ver la lectura como una alternativa más de ocio.