miércoles, 16 de abril de 2008

Mi madre y sus compras

Alguna vez habré comentado aquí que la comida no es una de las cosas que más me atraigan, es una pena, ya lo sé. Quizá sea ese el motivo por el que suelo comer muy despacio haciendo que mis padres, que me acompañan en la mesa, se desesperen a veces. Pero es que ellos comen muy rápido así que, para evitar problemas, decidimos que acaben cuando quieran y que me dejen a mí tranquilita y solita, que ya terminaré, quitaré la mesa y fregaré los platos. Todo esto lo cuento porque ayer salí de compras con mi madre y me sorprendió que se parase a comprar una cuchara más grande de lo normal. Cuando le pregunté para qué la quería me contestó que era para mí, a ver si así comía más rápido. Bueno, sin comentarios... Ya les diré si el tamaño de la cuchara influye en la velocidad para comer. No lo creo.