viernes, 30 de mayo de 2008

Licor de zarzamora salvaje: continuación

Temblando estoy ya de que llegue esta noche. Todos los viernes nos reunimos los amigos en el mismo bar y en el mismo sitio y nos tomamos nuestras copitas y nuestros bollitos de sobrasada o roquefort. Pero creo que hoy todo esto se me atragantará puesto que Emilita y "el niño" ya llegaron ayer a Madrid y esta noche estarán aquí. Ya me enviaron un mensaje de móvil diciendo que en Polonia le habían dicho que no existía la zarzamora, que cómo me iba a traer el licor y a Agustín le mandó otro mensaje preguntándole que dónde porras se compraba eso. Encima yo le contesté exigiendo que no se presentase aquí sin mi licorcito, fuera como fuese. Agustín se salvará esta noche porque vive en Fuengirola pero yo no me escapo. Ahora que, eso sí, dejaré claro que toda la pandilla estaba implicada aunque la cara la diéramos Agustín y yo...