miércoles, 20 de febrero de 2008

Irreprimible tentación

Mucha gente cree que los bibliotecarios pasamos el día sentados, leyendo libros y periodicos (ya quisiéramos algunos, ¿verdad?). De hecho, en más de una ocasión me han preguntado si aquí no me aburro y me dan conversación pensando que de esa forma ayudan a pasar estas tediosas horas. Por eso (y porque no tengo tiempo) no suelo leer libros en la biblioteca. Pero hoy no he podido reprimir la tentación de traerme de mi casa el libro de Nieves Concostrina que estoy leyendo y que ya estoy a punto de terminar. Se titula Polvo eres. Son historias de muertos escritas con tal humor que me tienen enganchadita. Así que, aunque sea escondida entre las estanterías, hoy leeré en la biblioteca, y acabaré el libro.

4 comentarios:

Beloca dijo...

Hay que sacar tiempo de donde sea para leer, y más si tienes tantos libros donde elegir. Cuando un libro me tiene enganchada me lo llevo a todos sitios incluso al trabajo aunque la mayoría de las veces solo le doy un paseo pero bueno, me gusta sentir la historia cerca de mi y la intriga de saber como continuará.

Menganita dijo...

Hola, Conchi, si quieres saber más de Nieves Concostrina, tiene una sección con el mismo nombre en Radio 5, a varias horas del día (7.20 y 22.20 que recuerde ahora mismo)

Anónimo dijo...

Yo también paseo los libros de un lado para otro, intentando sacar unos minutos de lectura de algunos huecos en mi hornada escolar.
A veces es complicado. Ahora llevo un par de semanas muy liada sin apenas avanzar en el libro que tengo entre manos. Estamos examinando para cerrar la evaluación en cuanto volvamos de la Semana Blanca y Semana Santa.
También la gente piensa de los profes que como tenemos "muchas vacaciones" tenemos mucho tiempo libre. Lo que no saben, es la cantidad de trabajo que diariamente nos llevamos para casa; sobre todo si eres profesor de Lengua: no solo nos limitamos a corregir exámenes, sino redacciones, trabajos de literatura... Y además nos lo leemos, al menos yo.
Y la verdad recomendamos leer libros pero, a veces, no tenemos tiempo ni para leer una página de un libro. Yo robo muchas horas de sueño para poder avanzar en mis lecturas, pero últimamente el sueño me puede y apenas leo medio página. Se me cae el libro de las manos

Anónimo dijo...

Sí, eso del "tiempo libre para leer" es muy normal que te lo digan en este trabajo. Yo siempre digo que si te pones a leer no haces tu trabajo. Normalmente en una biblioteca siempre hay algo que hacer; lo que ocurre es que la inmensa mayoría de los usuarios de las bibliotecas (y muchos concejales de cultura) desconocen las tareas que debemos realizar y sólo ven a una persona sentada detrás del mostrador que presta libros. Yo siempre que puedo se lo explico a quien lo quiere oir. Aunque creo que es una batalla perdida, como lo de las vacaciones de los maestros.