lunes, 7 de abril de 2008

Actimel

Siempre me cuesta levantarme temprano pero últimamente parece que me cuesta aún más. Cuando suena el despertador me da la sensación de que sólo he dormido una hora o dos. Así que he decidido que a partir de hoy voy a cambiar mi forma de desayunar. El sábado me compré un paquete de Actimel y todas las mañanas, antes de mi café, me voy a tomar un botecito. No es que me deje llevar por la publicidad pero sí he pensado que malo no debe ser, y voy a ver si hace algún efecto y me reanimo un poco. Ya les contaré.

4 comentarios:

Beloca dijo...

Hombre, por fin vamos a poder ser testigos de una prueba realizada en un ser humano.
Díme como te va sentando porque ya sabes que yo estoy siempre muy mal de lo mío.
Yo no me fio mucho de estos "bios" y "actimeles" pero como están tan buenos cuando puedo me los compro, yo no suelo notar nada, pero tampoco los tomo con mucha habitualidad así que si te van bien avísame y me saco un bono de 100 actimel

Anónimo dijo...

A mí me gusta todo tipo de yogures y los actimel.
Tengo temporadas en que tomo uno al día.
Lo que sí va muy bien para el intestino es tomar cereales con yogur o con fruta.
Para estar más despierta y más activa a mí lo que me va mejor por la mañana es un buen chute de café con leche.
habitualmente tomo dos cafés al día: uno a las 7.30, antes de ir al colegio, y otro en el recreo: las 10.30
Procuro no tomar ninguno por la tarde, porque de vez en cuando, los fines de semana en que me tomo un tercero, no consigo dormirme.
El café puede ser un fastidio tomado en exceso, pero con moderación, nos activa y da energía; nos pone en marcha.
Ahora mismo estoy hecha polvo del fin de semana y del madrugón de esta mañana, pero si me tomo un café ( son las 6.30) esta noche es probable que me desvele.
Entre el sábado y el domingo he visitado el parque dolménico de Antequera y la Cueva de la Pileta en Benaoján - pueblecito junto a Ronda-. Ha sido un disfrute para nuestros sentidos los verdes paisajes de la serranía de Ronda y el aroma de las plantas silvestres.
Ahora me apetecería el aroma de un café para mantenerme despierta para corregir algunos exámenes e ir a la piscina a las 8.30

Anónimo dijo...

Hola Conchi. Hace tiempo que no entro por aquí y hoy he dedicado un ratito a leer alguna de tus entradas. La de hoy me ha hecho gracia con eso de que últimamente te cuesta más aún levantarte temprano. Hija, eso siempre cuesta. Yo me levanto todos los días (excepto sábados y domingos, claro) a las 6 de la mañana. Suena el despertador y doy el salto (claro que para ello me lo pongo en el salón y me veo obligada a salir disparada a apagarlo para no despertar al resto de vecinos). Me cuesta levantarme como a cualquiera, pero he de hacerlo. En este tiempo es normal que cueste más porque ya lo dice el refrán "LAS MAÑANITAS DE ABRIL, SON MUY RICAS DE DORMIR". No creo que soluciones mucho con eso del actimel. Tiene muchas vitaminas y dicen que te da energía para afrontar el día. Bueno, no digo que no tengan razón, pero no hay nada milagroso ante el cansancio y mucho menos ante este cansancio primaveral. Mi madre, que casi siempre anda baja en defensas lo comenzó a tomar; y sí, igual mejoró algo en cuestión de defensas, pero también mejoró algo en kilitos. Si, tal como te lo digo. Se le pegaron unos kilillos más y le dijo su dietista que el actimel tiene eso, te ayuda en cuanto a defensas, pero también te ayuda a que ganes unos pocos de gramitos que luego cuesta quitar. No quiero desanimarte, pero no podía dejar de contártelo por si te llevas alguna sorpresilla.
De todas formas, ánimo que eso de tener la sensación de haber dormido poquito, creo que a nadie se nos pasa. Aún así, ya nos contarás tu experiencia. Igual no funciona para todo el mundo de la misma forma y a ti sólo te anima y no te ayuda a subir sólo el ánimo, ¿no?
Besos.

Anónimo dijo...

He olvidado decir que yo me sigo apuntando a un buen café bien cargadito antes de comenzar mi jornada de trabajo, sin leche por supuesto, para que no pierda su sabor (a parte de que no soy muy amiga de la leche). Se me hacen largos los 32 km que tengo que recorrerme hasta que llego al instituto y me paso el trayecto soñando con ese cafelito calentito y mi pitufo bien cargado, porque antes de salir de casa sólo tomo un yogourt de cereales y eso no me da para la jornada. Es la comida que más disfruto de todo el día.
Chao.